Mobiliario ergonómico
ESCRITORIO:
Un buen
escritorio de trabajo debe facilitar el
desarrollo adecuado de la tarea; por ello, a la hora de elegir un escritorio para trabajos de oficina, deberemos exigir que
cumpla los siguientes requisitos
- Si la altura es fija, ésta será de aproximadamente 70 cm. En este caso, es fundamental que la silla sea regulable, o se debe usar un apoyapiés para aquellos que lo precisen (es aconsejable que éste sea de material antideslizante)
- Si la altura es regulable, la amplitud de regulación estará entre 68 y 70 cm
- La superficie mínima será de 120 cm de ancho y 80 cm de largo.
- El espesor no debe ser mayor de 3 cm. Permitirá la colocación y los cambios de posición de las piernas.
- La superficie superior no sólo debe ser lisa sino tiene que ser de un color que permita descansar la vista y no genere efectos psicológicos negativos
- Además esta no tiene que reflejar la luz proveniente de cualquier fuente, por lo cual debe ser mate. Esto permitirá eliminar reflejos, deslumbramientos y otros efectos que producen el cansancio de la vista por esfuerzo
- Otro punto a tener en cuenta es la terminación del contorno, este tiene que ser bien redondeado, para evitar que al apoyar los brazos, marque la zona de contacto y cierre la circulación de la sangre a las manos.
Figura 2.2. Escritório ergonómico
EL PORTA DOCUMENTOS O ATRIL:
Cuando
se necesita trabajar de manera
habitual con documentos impresos, se
recomienda la utilización de un
atril. Las características que debe reunir son las siguientes:
Ser ajustable en altura e inclinación en
distancia
· El soporte donde descansa el documento debe
ser opaco y con una superficie de baja reflectancia.
· Tener resistencia suficiente para soportar el
peso de los documentos sin oscilaciones.
SILLA:
El asiento de trabajo deberá ser
estable, proporcionando al usuario libertad de movimiento y procurándole una
postura confortable.
La concepción ergonómica de una silla
para trabajo de oficina ha de satisfacer una serie de datos y características
de diseño:
Altura del asiento: silla de descanso,
de 38 a 45 cm; silla de trabajo, de 43 a 50cm.
La altura del asiento se ajusta
correctamente cuando los muslos del individuo que se sienta están horizontales
y la parte inferior de la piernas esta vertical y los pies descansan de manera
plana en el piso, los lados suaves de debajo de los muslos no son adecuados
para una comprensión sostenida, la presión del lado frontal del asiento puede
volverse incomoda. Por ello, el caso limitante para la altura del asiento es el
de una persona con piernas cortas que no podría descansar sus pies en el suelo,
si la distancia entre el asiento y el piso fuera más alta que el largo de sus
piernas.
La altura de una silla de descanso
permite que la piernas se estiren bien hacia afuera, esta una de las posturas
de descanso preferidas para los pies, además de que ayuda a estabilizar el
cuerpo; sin embargo, en una silla de trabajo, el individuo que se sienta
probablemente tiene que estar en una posición más derecha con los pies planos
sobre el piso.
Si la silla necesita ser más alta que
las dimensiones recomendadas (tal vez debido a una maquina muy alta o un banco
alto de trabajo), se recomienda también una recargadera para los pies que se
ajustable.
Ancho del asiento: de 43 a 45 cm.
La dimensión apropiada es el ancho de la
cadera y como existe una diferencia principal de sexo en esta dimensión, en
caso límite debería ser el rango superior del ancho de una mujer que se sienta.
Profundidad del asiento: silla de
descanso, de 40 a 43 cm; silla de trabajo de 35 a 40 cm.
Si el asiento es más profundo que el
tamaño de los muslos de la persona más baja en el lado frontal del asiento los
restringe, de tal modo que su área lumbar deberá curvarse para poder alcanzar
el respaldo; además, las áreas sensibles a la presión de la parte posterior de
la rodilla se sentirán presionadas contra el asiento. Si la altura del asiento
es la adecuada y los pies pueden descansar planos sobre el piso, habrá pocas
posibilidades de que ocurra fatiga de comprensión en los muslos.
Angulo del asiento: silla de descanso,
de 19 a 20 grados; silla de trabajo, menos de 3 grados.
Esto se refiere al ángulo de la
superficie del asiento con el plano horizontal, pues una superficie de asiento
inclinada hacia atrás produce dos efectos
- Debido a la fuerza de gravedad, la espalda del que se sienta se mueve hacia el respaldo de tal manera que se reduce la carga estática de los músculos de la espalda
- La ligera inclinación de la superficie del asiento, que ocurre después de dos periodos prolongados, lo cual observaron Branton y Grayson (1967). En una silla de descanso, el individuo desea relajarse, cuya posición de máximo relajamiento, por supuesto, es llegar a estar horizontal, y un asiento hacia atrás inclinado ayuda a lograrlo.
Mandal (1976) ha llevado más lejos sus
argumentos en cuanto a esto y dice que, como la mayoría del trabajo se realiza
en una postura de inclinación hacia adelante, sería más apropiado un asiento
con un ángulo inclinado hacia adelante. Dicho investigador sugiere que un
asiento de trabajo con respaldos recargados hacia atrás, aun de 5 grados, solo
causaría un enderezamiento del área lumbar y, por lo tanto, incomodidad.
Sus resultados indican menos alargamiento
de los músculos y más distribución de presión cuando se usan las superficies de
asiento inclinadas hacia adelante (15 grados) que cuando los asientos están
inclinados hacia atrás; sin embargo, la sugerencia de que las sillas de trabajo
deben ser inclinadas hacia adelante ha de tratarse con cierta precaución, pues
esto tendría a desestabilizarse el cuerpo en incrementar la tendencia a
resbalarse hacia adelante, además la ventajas de apoyo del respaldo serian
menos evidentes. Por tanto, otros músculos podrían sobrecargarse para
comprensar la carga reducida de los músculos dorsales.
Altura y ancho del respaldo: de 48 a 63
cm de alto; de 35 a 48 cm de ancho.
Las alturas y dimensiones propuestas
para el respaldo se relacionan simplemente con la distancia desde el hombro
hasta la parte inferior del glúteo (altura) y de hombro a hombro por el ancho.
Sin embargo, como fue evidente, las dimensiones lineales del respaldo son solo
una parte de la cuestión, (es decir, que no sea fatigante), la forma y el ángulo
del respaldo son muy importantes; además, como la curvatura de la columna varia
grandemente de una persona a otra, surge una relación compleja entre alturas y
formas.
Se requeriría un espacio de por lo menos
12.5 a 20 cm para acomodar los glúteos de esta manera. Por último, un respaldo
alto quizá ayude a prevenir la movilidad total de los brazos y de los hombros
para ciertas tareas, por ejemplo, escribir a máquina.
Ángulos del respaldo: de 103 a 112
grados.
Al igual que una superficie de asiento
en ángulo, el ángulo del respaldo a la superficie del asiento sirve a dos
propósitos: a) impide que el ocupante resbale hacia adelante, y b) hace que se
recargue sobre el respaldo y encuentre apoyo para las regiones sacra y lumbar.
Jones (1969) estudio la postura y los
sentimientos de comodidad en un asiento de automóvil altamente ajustable para
muchas posiciones diferentes. De sus datos, Jones ha sugerido un ángulo de 108
grados para el respaldo.
Altura del descanso para el brazo: silla
de descanso, de 21 a 22 cm arriba del asiento comprimido.
La función principal del descanso para
el trazo es que este se apoye cómodamente para poder colocar el cuerpo en una
posición estable. Los descansos para el brazo pueden también ser útiles para
ayudar a cambiar de posición o para levantarse de la silla; sin embargo, cabe
recordar que los descansos para los brazos pueden limitar el movimiento de
estos y de los hombros, si son incorporados a una silla de trabajo.
Acojinado y tapizado.
La importancia del acojinado la demostraron Branton y Grayson (1967) en un estudio observacional de individuos sentados en dos tipos de asiento.
El acolchonado tiene dos funciones
importantes
- Ayuda a distribuir las presiones sobre las tuberosidades isquiatricas y sobre los glúteos, causadas por el peso de la persona que se sienta (como ya se vio, si no se alivia, esta presión puede causar incomodidad y fatiga).
- Permite al cuerpo adoptar una postura estable.
Respecto al forro (tapiz) del asiento,
los aspectos importantes son la habilidad para disparar el calor y la humedad
generada por el cuerpo sentado (que, a su vez, se relacionara con el medio
ambiente en el que el individuo está sentado), y su habilidad para resistir el
movimiento de resbalar hacia adelante, que es natural al cabo de cierto tiempo.



No hay comentarios.:
Publicar un comentario